Seguimos nuestra aventura de decoración y aprovechamos la corriente para arrancar este mes de junio, verano y juventud.
La década de los 2000 está marcada por los atentados, la recesión y la guerra de Iraq; el crecimiento de Internet tal y como lo conocemos, los videojuegos, las televisiones de pantalla plana y el cambio cultural ultra acelerado. Una década que tenemos muy cerca y, por tanto, nos cuesta diferenciar fehacientemente de la actualidad.
La tecnología comienza a formar parte de nuestro día a día: PC para los más pequeños, TV más grande cada vez, varios dispositivos por vivienda… Lo que produce un aumento del teletrabajo, del tamaño de los escritorios, el nacimiento de apliques en el mobiliario pensados únicamente en aprovechar la tecnología….
La recesión, el miedo y la inseguridad, a la vez, provoca una tendencia al ahorro que conduce hacia el auge de IKEA, que comienza a ganar puntos entre el público con sus muebles de precio mínimo y acabado sencillos y lineales.
Además, también se inicia una corriente de diseño «personalizado» donde todos quieren destacar su carácter en la decoración de sus viviendas: colores, tejidos, acabados formas… Todo vale para diferenciarse de los demás.
Arrancamos el nuevo milenio, nos empezamos a modernizar y la decoración de interiores ya no dista tanto de la actual. Cambiarán las modas de colores y tejidos. Pantone marcará tendencias, así como las fábricas y nosotros mismos (tiendas de muebles). Pero empezará a costar diferenciar los modelos y acabados.
Aquí tenéis algunos ejemplos de decoración de la década pasada: